Ministerio de Salud y Seguridad Social (Neuquén, Argentina) | 9 de marzo de 2010
A partir del 26 de enero pasado, el sistema sanitario neuquino cuenta con la resolución Nº 082, la cual adhiere al compromiso nacional de minimizar la exposición y el reemplazo de elementos que contengan mercurio dentro del sector salud. Se capacitará y se instruirá a los centros asistenciales en los procedimientos de compra de insumos.
En relación a esto, profesionales de la subsecretaría de Salud de la provincia del Neuquén, expresaron la importancia de esta resolución y dijeron que es un primer paso para empezar a darle más relevancia al tema de la salud ambiental y a la epidemiología ambiental. Por otra parte, se manifestaron expectantes a lograr el recambio de termómetros y tensiómetros con mercurio en el sistema de salud.
Viviana Herrera, directora general de Atención Primaria de la Salud, explicó que la sanción de dicha resolución “fue posible gracias a la iniciativa de la Dra. Laura Moreno que proponía que se regule y se recambien los termómetros y tensiómetros que son algunos de los elementos que contienen mercurio”.
A partir de esto, se tomó como modelo la resolución Nº 139/09 de Nación y se elaboró una normativa en la cual el ministerio de Salud resolvió que: de manera progresiva se reduzca el uso de elementos que contengan mercurio en el sector del cuidado de la salud y su reemplazo por alternativas más inocuas.
Laura Moreno, médica pedíatra, del Centro de Salud Nueva Esperanza, y miembro adherente a la Campaña Salud sin Daño, dijo que “la normativa establece instruir a todos los hospitales y centros de salud de la provincia, ya sean públicos o privados, para que de ahora en adelante todo lo que se compre debe ser libre de mercurio”, y “se fijo el año 2015 como fecha límite para que todas las instituciones hayan realizado el recambio de elementos de mercurio a sin mercurio”.
A su vez, se propone la creación de un grupo de trabajo que dependerá del departamento de Salud Ambiental, cuya función será trabajar sobre el tema, no sólo hacia adentro del sistema, sino ofrecer a la gente la posibilidad de acercarse para que conozcan los riesgos del mercurio, el porque del recambio, y que hacer si se encuentran ante una situación peligrosa como la ruptura de un termómetro de mercurio.
A nivel nacional no sólo se encuentra la resolución a la cual adhiere la provincia, sino que el 9 de febrero de este año, el ministerio de salud de Argentina resolvió prohibir la producción, importación, comercialización o cesión gratuita de tensiómetros con mercurio tanto para la atención médica como veterinaria. Esta medida, al igual que las anteriores, busca evitar los impactos sanitarios y ambientales (Res. Nº 274/10).
Trabajo continuo y comprometido
La Dra. Moreno es miembro adherente a la Campaña Salud Sin Daño, que es una asociación internacional que trabaja para transformar el sector de cuidado de la salud promoviendo la utilización de alternativas ambientales amigables y saludables, para reemplazar aquellas que contaminan y que contribuyen a provocar nuevas enfermedades.
Explicó que “en la provincia comenzamos a trabajar con la propuesta para la eliminación de elementos con mercurio en el año 2007 en el hospital Heller. Se comenzó a capacitar al personal de enfermería y médicos pedíatras, consiguiendo que en septiembre de ese año la dirección ejecutiva firmara el compromiso de eliminación progresiva del mercurio en el hospital”.
“De esta manera, se comenzó con el recambio de todos los termómetros de mercurio por los digitales en el área de neonatología a partir de una donación de la organización Salud Sin Daño. También se recibieron donaciones de la cooperadora y de laboratorios consiguiendo el recambio total en los sectores de cuidados intermedios, sectores críticos, centro obstétrico y consultorios externos”, comentó la médica pedíatra. Y agregó que “a partir de ese compromiso también comenzaron a realizar las compras de alternativas sin mercurio que son nocivas y tienen la misma precisión”.
Toda esta iniciativa continuó y continúa con jornadas de capacitación para los distintos efectores, en las que cada representante se lleva la información para difundirla en su región, y así de esta manera cada hospital y centro de salud, como Centenario, San Patricio del Chañar, Plottier, Junín, entre otros, se van comprometiendo con el recambio y con el mecanismo de compra de insumos.
Riesgos del mercurio en la salud y el ambiente
El mercurio es un metal pesado, neurotóxico, que básicamente daña el sistema nervioso central. Las fuentes de contaminación de mayor toxicidad para el ser humano son la inhalación del mercurio que contienen los termómetros y los tensiómetros, y la ingesta de pescado contaminado.
Si una mujer está embarazada y consume pescado o inhala vapores puede trasmitirlo al bebé, generándole trastornos en el sistema nervioso, problemas de desarrollo generalizado, y se presume que esta sustancia podría estar relacionada con el desarrollo de autismo, trastornos en el aprendizaje y retrasos madurativos. A su vez, el mercurio tiene alto impacto tóxico para los ecosistemas, por lo que la idea es que el equipo de salud no sólo trabaje para cuidarse y cuidar a los demás, sino también para proteger el medio ambiente.
Con respecto al los riesgos del mercurio, la doctora Viviana Herrera, manifestó que “esto es un punto de partida importante para reconocer el daño que estas sustancias como el mercurio y los agroquímicos pueden hacer sobre la salud de las personas y el ambiente”, y agregó que “tenemos que proponernos y comenzar a desarrollar el tema de la epidemiología ambiental, desarrollar laboratorios de toxicología, y empezar a hacer estudios ambientales más serios como para poder prevenir los daños”.
Desechos de los residuos
La Dra. Moreno explicó que “dentro de los sistemas sanitarios existen protocolos para desechar los residuos. Ya sea por el color de bolsa: negra (residuo común), roja (residuo patológico), amarrilla (residuo especial); o desechando electos en tachos o barriles rígidos como por ejemplo para elementos corto punzantes o descartables”.
Para la recolección de mercurio también existe cierto protocolo dentro de las instituciones hospitalarias, aunque a nivel mundial todavía no está determinado cual es la disposición adecuada y final para el desecho de este tipo de residuo.
En la provincia, los distintos efectores ante la presencia de derrame de mercurio proceden a la recolección con guantes, gotero, lo depositan en recipientes rígidos, rotulados y los guardan en lugares con determinadas características a la espera de saber donde va a ser la disposición final. Esto se debe a que el desecho del mercurio no se puede quemar, ya que de esta manera los residuos tóxicos se propagarían al aire, ni tampoco se puede utilizar como relleno sanitario porque terminaría filtrándose en el suelo y entraría en circuito.
Dirección de Comunicación Pública
Ministerio de Salud
Neuquén, martes 09 de marzo de 2010.