4 de octubre de 2011. 16 páginas.
Resumen:
Imagine si los centros de tratamiento de cáncer se construyeran sin materiales que provocan cáncer; si las clínicas pediátricas se construyeran sin emplear materiales que desencadenan asma; si los hospitales ofrecieran alimentos saludables...
Adoptar políticas que apunten a la construcción de edificios saludables no es más que ser coherente con el principio esencial de los profesionales de la salud: primero no dañar.